El Señor de
la Salud y su Madre nos protejan.
Hermanos:
Llego junio
empujando a mayo que se nos fue en un abrir y cerrar de ojos.
Pasaron las
comuniones, las confirmaciones, los rosarios a la Virgen, las procesiones de
Gloria, y también el curso escolar.
Y llegaron
las vacaciones
Ahora nos
toca disfrutar de nuestros hijos, o sobrinos, verlos crecer,” pero no desde
lejos”, volvámonos niños otra vez y
juguemos con ellos a sus juegos favoritos, llevémoslos de compras, a la
piscina, a la playa.
Contagiémonos
de sus risas, alegrías, esperanzas, ilusiones. Las que algunas veces tenemos
perdidas porque el discurrir diario nos hace almacenarlas en algún rincón.
Por lo
tanto, este verano volvamos a ser niños
y:
“DISFRUTEMOS
EL VERANO”
Hagamos un
poco de tiempo para acercarnos a visitar al Señor y su Madre a alguna iglesia
por donde vayamos pasando estas vacaciones y recordar siempre que:
“ELLOS” vienen con nosotros y nos protegen.